Una vez finalizada la campaña de la Dirección General de Tráfico para el control de consumo de drogas y alcohol por los conductores, los resultados son alarmantes. Nada menos que el 36% de los conductores sometidos a las pruebas dieron positivo en drogas. Nada menos que 145.636 pruebas de detección de alcohol y drogas ha realizado la DGT en las carreteras en la segunda semana de junio a los conductores. Los resultados son alarmantes. De las 1.872 pruebas de consumo de drogas, el 36% dieron resultados positivos (aunque más bien deberían denominarse negativos). De ellos, 255 conductores han sido trasladados ante la autoridad judicial por delitos contra la seguridad vial.
En una semana, 2.283 conductores han sido denunciados por los agentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil por conducir habiendo consumido alcohol o drogas. De ellos, 667 por dar positivo a drogas y 1.616 por alcohol. En total se han realizado 145.636 pruebas. Estos datos se enmarcan dentro de la campaña que la Dirección General de Tráfico puso en marcha entre el 6 y el 12 de junio y cuyo objetivo es poner fuera de la red viaria a aquellos conductores que habían bebido o consumido droga.