Otro dato a tener en cuenta, es que el propio presidente de este pais de momento no ha precisado si esta nueva obligatoriedad afectará a los vehículos nuevos o si deciden implartarlo finalmente en todos.
No obstante, fuentes oficiales han confirmado que en este pais este dispositivo está siendo probado desde hace más de diez años por los fabricantes franceses, sin que hasta ahora se hubiera tomado la decisión de que se convierta en obligatorio.
Según las autoridades, aseguran que hay que tomar medidas urgentes en este sentido, porque según los datos que desvelan, en Francia el número de fallecidos en las carreteras ha superado los 4.000 entre el el 1 de noviembre de 2010 y el 31 de octubre de 2011. También se anuncia que en breve se instalarán 400 radares suplementarios (por sorpresa) sin ser anunciados de forma oficial, los cuales gracias a su tecnología no podrán ser detectados por ningún tipo de dispositivo.
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