domingo, 13 de diciembre de 2015

Los sistemas de tracción total en invierno

La llegada del invierno trae consigo la temporada de esquí y deportes de invierno, lo que significa que la nieve se vuelve la protagonista en el ocio y en la carretera. Si hace unos días hablábamos sobre el mantenimiento básico del coche en invierno, en esta ocasión repasaremos los distintos sistemas de tracción total que podemos encontrar en los concesionarios oficiales, para que podáis elegir el que mejor se adapte a vuestras necesidades.



Los sistemas de tracción total podemos dividirlos en permanentes y desconectables. Los primeros, como su nombre indica, transmiten en todo momento la tracción a las cuatro ruedas sea cual sea la situación en la que se encuentre el vehículo, mientras que los llamados desconectables activan la tracción total según la adherencia disponible en la calzada.

Sistemas de tracción total permanente

Sobre los sistemas permanentes podemos distinguir entre los sistemas simples o los sistemas que emplean la llamada “reductora”, un sistema que acorta el desarrollo final de la transmisión para aprovechar mejor el Par motor. Estos últimos sistemas son usados exclusivamente en todoterrenos y 4x4 con un claro enfoque Off Road. Los turismos o compactos, en resumen, aquellos vehículos que no son todoterrenos, emplean la tracción total simple, sin sistemas reductores.

Con o sin sistemas reductores, los vehículos con tracción total permanente siempre tendrán una mejor respuesta en aquellas situaciones que demanden un extra de tracción, pudiendo ser ayudados además por sistemas de control de tracción y estabilidad que ayudan a mejorar aún más la motricidad. Además, pueden estar equipados con uno o más diferenciales de deslizamiento limitado, normalmente el diferencial central y trasero, aunque no es norma general.

A su favor juegan con una mejor motricidad y seguridad en todos los momentos, mientras que en su contra juega que suelen ser más caros en su compra además de estar penalizados por un consumo ligeramente superior.

Sistemas de tracción total desconectable

Por otro lado tenemos los sistemas de tracción total desconectable, que cada vez son más en el mercado. Estos sistemas se componen de los mismos elementos que los sistemas permanentes, con la diferencia que equipan un embrague tipo Haldex en el tren trasero que mediante discos de fricción y presión hidráulica conectan y desconectan el eje trasero de la transmisión, en función de la información recibida por los múltiples sensores del vehículo. Cuando dichos sensores detectan una pérdida de tracción en el eje delantero, envían la señal al ordenador del vehículo y este se encarga de determinar en qué cantidad y en qué momento es necesario conectar la tracción total mediante el eje trasero. Estos sistemas no suelen combinarse con sistemas reductores, aunque fuera posible hacerlo.

Los sistemas de tracción conectables tienen a su favor un menor consumo de combustible, ya que en condiciones normales el vehículo actúa como un vehículo de tracción a un solo eje. También a su favor tienen que pueden disponer de un reparto de Par entre ejes y ruedas controlado electrónicamente, determinando al instante que rueda demanda mayor Par o necesidad de tracción en cada momento. En su contra tienen una menor fiabilidad, especialmente en cuanto a los sistemas electrónicos, ya que un fallo en estos sistemas anula la capacidad motriz del eje conectable.

Como podéis ver, existen sistemas de tracción total prácticamente para cualquier situación o uso que se le vaya a dar al vehículo. En caso de frecuentar zonas con nieve, siempre será mejor un sistema de tracción total permanente, mientras que si solamente se pisa nieve o condiciones meteorológicas adversas de vez en cuando, es mejor un sistema desconectable que nos ayude en determinados momentos a ganar motricidad.

Via - quadis.es

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