El precio estará en torno a los 100.000 dólares (unos 91.000 euros al cambio), todo ello en función del motor que se elija como base y las mejoras que se le hagan al coche original. Con tal precio es una opción en la que desde luego lo sentimental está por encima de todo lo demás. Cabe recordar que, el DeLorean DMC-12 se comercializó entre 1981 y 1983, con una producción total en torno a las 9.000 unidades. Su motor era un PRV 2.8 V6 de 130 CV de potencia y 208 Nm desarrollado por Peugeot, Renault y Volvo. El cambio podía ser manual de 5 velocidades o automático de 3.
Lo cierto es que la vida comercial del DeLorean DMC-12 no fue buena debido a la calidad de sus materiales. Fue dos años después de que se dejara de producir, allá por 1985 con el estreno de la película, cuando alcanzó su fama mundial. Pero para entonces ya no se podía comprar un DeLorean nuevo, algo que se quiere subsanar a ahora en parte. Los DeLorean DMC-12 usados están cotizados en torno a los 50.000 dólares (unos 46.000 euros).
Stephen Wynne, CEO de DeLorean, asegura que llevaban tiempo detrás de este anuncio, ya que hasta ahora estaba prohibida su vuelta al mercado. Desde 1987 lo que quedó de DeLorean se trasladó a Houston para seguir con una actividad basada básicamente en la restauración de unidades ya existentes.
Se van a respetar el diseño original de Giugiaro, las puertas de alas de gaviota, la posición trasera del motor y la carrocería sin pintar de acero inoxidable, aunque no se descartan algunos cambios que mejoren un coche que se proyectó en 1981 con unos estándares de calidad cuestionables. Seguramente estos cambios afectarán más al interior, mucho menos atractivo que el prototipo de la película.
Eso sí, no esperes en ningún caso que el precio incluya algún viaje a través del tiempo…
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Via - mascoche.net
Stephen Wynne, CEO de DeLorean, asegura que llevaban tiempo detrás de este anuncio, ya que hasta ahora estaba prohibida su vuelta al mercado. Desde 1987 lo que quedó de DeLorean se trasladó a Houston para seguir con una actividad basada básicamente en la restauración de unidades ya existentes.
Se van a respetar el diseño original de Giugiaro, las puertas de alas de gaviota, la posición trasera del motor y la carrocería sin pintar de acero inoxidable, aunque no se descartan algunos cambios que mejoren un coche que se proyectó en 1981 con unos estándares de calidad cuestionables. Seguramente estos cambios afectarán más al interior, mucho menos atractivo que el prototipo de la película.
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