lunes, 7 de marzo de 2011

Alfa Romeo 8C Spider: Un coche impresionante

Aunque sólo pueden disfrutar de él 500 afortunados hay que reconocer que este coche ha marcado un antes y un después dentro la firma. La ausencia de techo en este superdeportivo obligó a su fabricante a incorporar ciertos elementos para no perder rigidez en ningún momento. De hecho, su parabrisas está realizado integramente en fibra de carbono estructural, y también se le añadieron otros refuerzos de acero en el chasis, incluso su depósito se tuvo que desplazar hacia delante para mejorar el reparto de masas.


Su capota que está realizada en lona se pliega de forma semiautomática y siempre con el coche parado. Antes de pulsar el botón que inicia el funcionamiento hay que desenganchar una fijación central del marco del parabrisas (puede verse en el video), Según su fabricante, se hizo de esta manera para poder prescindir de ningún tipo de motor eléctrico para efectuar esta maniobra, y con ello conseguir aligerar un poco su peso. Hay que resaltar que si de algo carece este coche es de maletero, ya que en su interior tan sólo ofrece espacio para una maleta.


Tras varios proyectos que tenía la firma para su carrocería, finalmente decidieron hacerla toda de fibra de carbono, éste material también se ha utilizado en muchas zonas y componentes del interior como el botón de arranque, el freno de mano eléctrico, las levas del cambio situadas tras el volantes, entre otros componentes más. Otro material que se ha utilizado es el aluminio, el cual se puede ver que destaca en la consola central, quees una pieza monobloque que está pulida a mano.


Por otro lado, hay que destacar la precisión que la dirección que ofrece este modelo y sus reacciones que son muy previsibles y progresivas al mismo tiempo. Incluso los provadores de coches aseguran que no es necesario conectar el control de estabilidad para poder sacarle un buen partido a este superdeportivo de propulsión posterior. También aseguran que el cambio manual resulta muy suave en su modo automático, pero cuando se activa el modo Sport su personalidad cambia de forma radical, es entonces cuando varían la respuesta del pedal del acelerador, la dureza de la dirección y la gestión de la centralita para que el motor sea más incisivo, hasta el sonido se vuelve en esta ocasión más agudo.

Goza de disponer del mismo motor que mueve al 8C Competizione, estamos hablando de toda una maravilla de la mecánica de origen Ferrari, que tambien lo utilizan modelos como el Maserati GranTurismo. Su sonido junto con la forma de entregar la potencia que tiene este motor dejan de manifiesto que estamos sin duda ante una máquina realmente impresionante. No cabe duda que este tipo de coches le levantan el ánimo a cualquiera.

Sus suspensiones tanto delanteras como traseras son de paralelogramo deformable. Sus frenos son de discos carbocerámicos de 380 mm delante y 360 mm detrás. Sus neumáticos son 245/35 R20 delante y 285/35 20 detrás. 
 
Su motor es un 8V de 4.7 litros de inyección electrónica multipunto que desarrolla una potencia de 450 CV a 7.000 rpm y un par máximo de 480 Nm a 4.750 rpm. Consigue acelerar de 0 a 100 km/h en sólo 4,5 segundos y su velocidad máxima se sitúa en los 292 km/h. Todo ello asociado a un cambio robotizado secuencial de seis velocidades. Su consumo mixto es de 16,3 l/100 kms y sus emisiones de CO2 alcanzan los 379 gr/km.

En cuanto a sus dimensiones, su longitud es de 4,38 metros, su anchura 1,89 metros y su altura es de 1,37 metros. Su batalla alcanza los 2,65 metros y su peso es de 1.675 kg.

Lo más triste de todo es que todas las 500 unidades que se hicieron ya están vendidas, y fueron entregadas a lo largo de un año a sus respectivos propietarios, eso sí, siguiendo un riguroso orden de pedido.

Aunque no es un dato muy relevante a estas alturas, en su puesta marcha su precio era de 232.000 euros.






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