Tanto es así, que retoma una denominación mítica en la marca aunque en esta ocasión ya no se aplique a un seis cilindros en línea sino a un modernísimo cuatro cilindros de inyección directa de alta presión (200 bares), con el sistema denominado Valvetronic de tiempo de alzada variable de las válvulas de admisión, complementado con el efecto de un turbo simple de doble entrada.
Aunque la marca no ha facilitado por completo la información técnica detallada, en un principio os podemos decir que quedan claras las evidentes ventajas que puede ofrecer en cuanto a la conducción por su menor peso frente a un seis cilindros y la elasticidad que le aporta su sobrealimentación.
De todas formas podemos adelantar que este coche anuncia 35,9 mkg de par a sólo 1.250 rpm y una plana curva de par que le llevaría hasta unos flamantes 240 CV de potencia. No obstante, su fabricante ha declarado que tendrá su debut en Estados Unidos en otoño de este mismo año.
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