Por otro lado, su reparto de par es de 40:60 delante y detrás y puede variar sobre superficies deslizantes, con un máximo del 65 por ciento en el eje trasero. Pese a su aspecto este Audi carece de reductora, y en el campo saca partido a su diferencial central autoblocante y a un eficaz control de descensos. Su control de estabilidad también cuenta con una función "off road" que retarda su actuación fuera del asfalto para una conducción más lógica.
En cuanto a su mecánica, las versiones de gasolina ofrecen potencias de 180, 211 y 270 CV, mientras que los diesel las potencias son de 170 y 240 CV, los cambios son manuales de seis velocidades ó S tronic de siete velocidades. Su consumo va de los 6,5 a los 9,3 l/100 kms.
Este año su precio arranca desde los 39.850 euros hasta llegar a los 55.650 euros.
Para finales de 2011 se espera la llegada del Audi Q5 Hybrid del que ya hemos hablado aquí y que ofrece una potencia de 245 CV y gastará menos de siete litros al combinar un motor de 2 litros TFSI con otro eléctrico.
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