Lo que si que ha demostrado este coche es que ha sido fabricado a medida para los circuitos, y lo más curioso de todo es que sigue compartiendo gran número de elementos con la versión de calle que todos conocemos. Es también el primer vehículo de serie de Ford que se une por tanto a la familia de coches que se venden equipados para realizar carreras como otros tantos modelos como por ejemplo; el Mustang FR500C, el FR500S, el Cobra Jet, el Boss 302R y el Boss 302S entre otros.
En cuanto a su mecánica, a esta versión se le ha dotado de un motor EcoBoost de 2 litros que ofrece una potencia de 250 CV. Por otro lado y según las normas que dictamina la Federación Internacional de Automovilismo (FIA) para este tipo de vehículos, también ha tenido que ser dotado con barras antivuelco, así como de frenos más potentes y de suspensión de competición para los circuitos.
Finalmente, el propio director de Ford Racing el conocido Jamie Allison ha declarado; que todo aquel que quiera adquirir un vehículo como este, tan sólo necesitará un equipo de tres comunicaciones y unos simples adhesivos para poder salir a correr cuando lo desee.
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