Mitsubishi Lancer Sportback 200 DI-D Motion

En esta ocasión y como ya sabemos todo el mundo, actualmente la popularidad que tiene Mitsubishi en nuestro pais está basada especialmente en sus coches todoterreno (y más ahora después del lanzamiento del ASX), no obstante, también hay que reconocer que este fabricante siempre ha contado con una buena gama de turismos que se han sabido ganar la admiración de cualquiera.

 

Lo que si que está claro según hemos podido comprobar en primera persona, es que este Mitsubishi Lancer Sportback 200 DI-D Motion resulta bastante satisfactorio como vehículo de uso diario, e incluso también para realizar de vez en cuando viajes de larga duración, no obstante, cabe destacar que aunque sus suspensiones son bastante confortables, sus llantas de 18 pulgadas que son de serie con neumáticos de bajo perfil no son las más adecuadas para este coche.

Por otro lado, nos resulta bastante complicado clasificar este modelo en el segmento más acertado especialmente por línea y tamaño, ya que con sus casi 4,60 metros de longitud adentrarlo en el mismo grupo de los compactos no sea quizás la opción más acertada.

En su interior, nos ofrece un ambiente sobrio y la terminación es correcta, destacando también que toda su instrumentación es sencilla y fácilmente legible. Dentro del habitáculo (aún a pesar de su longitud exterior) sus plazas traseras son bastante amplias sobre todo en cuanto a espacio para las piernas se refiere, el conductor también goza de un asiento que recoge muy bien el cuerpo para una conducción firme, no obstante, un detalle a tener en cuenta es que la columna de dirección tan sólo se puede regular en altura, esto puede resultar un problema para que algunos conductores puedan encontrar finalmente su postura más ideal.

A lo que su equipamiento de serie se refiere, Mitsubishi ofrece un amplio abanico de elementos como; airbags frontales, laterales y de cabeza para conductor y acompañante, airbags de cabeza traseros, airbag de rodilla para el conductor, control de tracción, sistema antibloqueo de frenos ABS, repartidor electrónico de la fuerza de frenado EBD, asistente en frenadas de emergencia BAS, control de estabilidad ASTC, ordenador de a bordo, cuatro elevalunas eléctricos, dirección asistida, control de velocidad de crucero, sensores de lluvia e iluminación, sensores de aparcamiento traseros, retrovisores exteriores regulables electricamente, volante multifunción, climatizador automático, sistema de sonido Rockford Fosgate con CD, MP3, conexión AUX y nueve altavoces, faros antiniebla delanteros y las llantas de 18 pulgadas que hemos mencionado anteriormente las cuales no nos han gustado. 

En cuanto a su mecánica, este modelo dispone de un motor diesel de cuatro cilindros en línea turboalimentado de 1.8 litros que ofrece una potencia de 150 CV a 4.000 rpm y un par máximo de 300 Nm entre 2.000 y 3.000 rpm. Con todo ello consigue acelerar de 0 a 100 km/h en 10,1 segundos y su velocidad máxima se sitúa en los 204 km/h, con un consumo medio homologado de 5,8 l/100 kms.

Hablando ahora de sus dimensiones, su longitud alcanza los 4.585 mm, su anchura es de 1.760 mm y su altura es de 1.515 mm. Su peso en vacio es de 1.500 kg.

Su precio arranca a partir de los 24.600 euros.