sábado, 30 de abril de 2011

Los fabricantes de coches recomiendan aceites ahorradores tipo 5W30

La lucha constante por la reducción de contaminantes siempre es uno de los temas que se suele abarcar como más prioritario en el mundo de los coches, de hecho como sabeis las marcas automovísticas son las primeras que lo hacen dotando a sus nuevos vehículos de todo tipo de nuevas tecnologías para ese propósito.


En este sentido son muchos los fabricantes que están deacuerdo en recomendar ciertos tipos de aceites para evitar con ello emitir más cantidad de contaminantes innecesariamente. Como ya sabeis al quemar el combustible en la cámara de combustión se producen compuestos que pueden afectar a la salud, y por esto, desde los años 80 la Unión Europea estableció las normas EURO, impuestas especialmente para disminuir las emisiones contaminantes.

Es por ese mismo motivo que los fabricantes han trabajado en la disminución de esos compuestos desde el principio, reduciendo el consumo de combustible y eliminando los formados en la cámara de combustión mediante el tratamiento de los gases del escape, utilizando filtros de partículas y catalizadores. 

Dicho esto, debeis saber que la disminución del consumo de combustible es posible mediante lubricantes ahorradores, de hecho, la ACEA tiene un ensayo donde se comprueba la disminución del consumo de carburante, el CEC L-054-96, obteniéndose con el 5W30 un ahorro de combustible superior al 2,5 por ciento cuando cumplen las normas ACEA A1/B1, ACEA A5/B5, C2 ó C1.

Por supuesto este descenso que hemos podido apreciar de consumo de carburante por kilómetro produce menos emisiones de CO2, y al mismo tiempo de productos peligrosos para la salud, que suelen surgir como resultado de la combustión como por ejemplo:

* Hifrocarburos inquemados. Parte del combustible no quemado.

* Óxidos de nitrógeno y monóxido de carbono, que nos pueden afectar seriamente a altas concentraciones.

* Partículas, que al respirarlas y en función de su tamaño, pueden ser retenidas en nuestros bronquios.

Para eliminarlos se utilizan los catalizadores, y en los vehículos diesel, el filtro de partículas que eliminaría las partículas. Es por eso que la Unión Europea ha establecido límites en las emisiones de los vehículos, tanto para el dióxido de carbono como para estos compuestos peligrosos para la salud.

Finalmente, las normas que limitan los compuestos peligrosos se denominan EURO y en ellas se establecen los límites máximos de emisiones aceptados desde el año que entran en vigor. Actualmente la norma que se aplica es la EURO V, para los nuevos modelos de coches y también nuevos motores que salen en el año de aplicación de la norma.

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