Toyota GRMN II

En esta ocasión nos encontramos ante un impetuoso ejemplar de Toyota que según asegura la propia firma es el fruto de la aplicación de la tecnología híbrida a la competición, de hecho su fabricante lo ha presentado coincidiendo con la carrera de resistencia de 24 horas de Nürburgring.

 

Estamos sin duda ante el prototipo de un nuevo modelo, denominado GRMN II está preparado por Gazoo Racing que no es otro que una escudería especilizada en coches de la marca japonesa y cuenta con un motor central de gasolina que está asociado a uno eléctrico. Por lo que podemos apreciar viene a ser la evolución del modelo presentado en el Salón del Automóvil de Tokio de 2010 y al que bien podría paracerse un futuro MR2.

No es necesario pararnos a comprobar la historia reciente de los modelos descapotables, ya que estamos hablando posiblemente del primer descapotable híbrido, un verdadero roadster que según afirman los expertos simboliza el placer por la conducción deportiva con un avanzado diseño y una mejorada tracción a las cuatro ruedas. Por otro lado, hay que reconocer que es inevitable que este atractivo coche de competición nos recuerde al antiguo modelo de Toyota, nos estamos refiriendo al MR2 Roadster que está movido por un motor central y propulsión trasera, aunque la tecnología híbrida evoca a la del SUV de Lexus RX450h.

En cuanto a su mecánica, debeis saber que cuenta con dos motores, uno de ellos el mismo 2GR-FXE de seis cilindros en V de 3.5 litros del RX. El motor principal de combustión que está situado en la parte central de la carrocería, se ocupa de mover las ruedas traseras que montan neumáticos 255/35 R19, en tanto que el motor eléctrico aporta el empuje a las ruedas delanteras que montan neumáticos 225/40 R19. Esta distribución de la tracción ha de permitir mejorar el comportamiento dinámico, y según sus creadores, la alta sensibilidad y capacidad de respuesta del vehículo hacen que no pierda ni una sóla pizca de diversión en su manejo.

Aunque no se sabe a plena certeza, los responsables aseguran que este prototipo no sobrepasa los 1.500 kg de peso, en tanto que sus motores entregan de forma combinada una potencia de 299 CV (de ellos 50 CV proceden del motor alimentado por las baterías), pero que a buen seguro, han de proporcionar unas prestaciones equivalentes a las de otros roadster como por ejemplo el BMW Z4 o el mismísimo Porsche Boxster S.

Lo que si es cierto es que de momento este modelo se queda sólo como un coche de demostración, pero que deja bien claro que los automóviles movidos con electricidad, incluso parcialmente como ocurre en un híbrido, pueden aspirar sin duda a poner las sensaciones a flor de piel a quien los conduce.

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