BMW M3

Desde que se lanzó el primer M3 hace dos décadas casi nadie podría imaginar que este modelo se convertiría de alguna forma en todo un signo para muchos amantes del automóvil. Por esa misma razón, su fabricante en cada nueva generación pone su máximo interés y cuidado para superar con creces a la anterior, de echo, siempre a sido así desde su primera puesta en marcha.

Tal y como podemos apreciar, estéticamente conserva ese aire discreto y amenazador de sus anteriores versiones, mientras que mecánicamente ofrece una brillantez que sobresale. En esta cuarta generación se ha permitido hasta el lujo de no incrementar su peso en cuantía frente a su antecesor a pesar  que es 12 cm más largo, empleando para ello materiales más ligeros como la fibra de carbono con la que está realizado su techo.

También ha experimentado un importante salto cualitativo en su bastidor, como ya sabeis siempre ha sido un coche muy bien puesto a punto y equilibrado, pero en esta generación ha ganado en confort sin perder en ningún momento el empuje deportivo. La electrónica por su parte, ha realizado milagros en este sentido y ha permitido con las suspensiones pilotadas alcanzar un grado de estabilidad altísimo manteniendo altas dosis de comodidad cuando la carretera está en malas condiciones.

Además, su capacidad de configuración se ha incrementado, porque la tecla M dispuesta en el volante se puede programar a nuestro antojo. Lo mejor es ajustarla con unos ajustes deportivos, como por ejemplo, con la suspensión pilotada EDC en la posición Sport (existe también la Normal y la Confort), el control de estabilidad en la posición M Dynamic Mode (que permite derrapar un poco sin llegar a desconectarse del todo), la respuesta del acelerador en posición Sport y la servodirección electrónica también en modo Sport para ganar en sensibilidad direccional. De esta manera el comportamiento de este deportivo es toda una gozada, es muy fácil de conducir rápido para los menos adelantados en la conducción deportiva y resulta sumamente divertido para los más expertos volantistas.

En cuanto a su motor, debajo de capó alberga un ocho cilindros en V de 4 litros a 90º con el que consigue desarrollar una potencia de 420 CV a 8.300 rpm y un par de 40,8 mkg a 3.900 rpm. Con esta mecánica consigue acelerar de 0 a 100 km/h en 4,8 segundos y su velocidad máxima se sitúa en los 250 km/h, todo asociado a un cambio manual de seis velocidades.

Sus dimensiones: Su peso alcanza los 1.580 kg, su longitud es de 4.615 mm, su anchura 1.804 mm y su altura es de 1.418 mm.