domingo, 30 de enero de 2011

Citroën C-Crosser

Con su excelente trabajo realizado en este todoterreno, la firma ha desarrollado un acertado automóvil familiar y polivalente al mismo tiempo. Hay que reconocer que no ha sido nada fácil para la firma desde que lanzó en el 2001 aquel prototipo en el que actualmente queda tan sólo el nombre de C-Crosser.


Podemos decir que en carretera su comportamiento es muy semejante al de un buen turismo convencional, y su aplomo en el paso por curva es notable y no se llegan a percibir demasiados balanceos, y el compromiso entre el confort y la firmeza de la suspensión está muy acertado.


Por otro lado, la combinación del cambio de seis velocidades de largo recorrido con preciso tacto con la fuerza del motor, resulta realmente idónea y el salto entre marchas está muy acertado. Su afinada tracción total representa más un plus de seguridad sobre superficies de baja adherencia que un recurso para aventurarse por los caminos, ya que sus largos voladizos, nula protección inferior y escasa altura al suelo limitan seriamente sus aptitudes para el campo.


En cuanto a su interior la cosa cambia, ya que es muy amplio y luminoso, ofreciendo materiales de calidad y unos correctos acabados. Dispone de 22 huecos portaobjetos y guanteras, algunos con salida de climatización y cerradura. La segunda fila de asientos se desplaza longitudinalmente y también se puede abatir eléctricamente. La tercera fila es equipo de serie, pero su uso queda restringido a niños y siempre durante cortos desplazamientos, ya que carece de espacio suficiente para acomodar a una persona de talla normal. Su maletero ofrece una capacidad de 184 litros, 510 litros con la tercera fila de asientos desplegada. En los modelos más equipados se ofrece navegador con pantalla de siete pulgadas y disco duro de 39 gigabytes o cámara de visión trasera.

Este modelo está ensamblado en la planta japonesa de Mizushima, se basa en una estructura monocasco autoportante de acero, con techo de aluminio, que descansa sobre montantes McPherson delante y un vanguardista multibrazo con muelles helicoidales para las ruedas traseras. Su propulsor turbodiesel DW12M se fabrica en Trémery (Francia), y sus cuatro cilindros en línea están mecanizados en un bloque de fundición, con culata multiválvula de aleación y dos árboles de levas accionados por correa dentada de distribución. La inyección es directa y por alta presión (estamos hablando de hasta 1.800 bares), con un tubo de geometría variable. La tracción se efectúa de forma permanente al eje delantero con acoplamiento electromagnético (ubicado junto al diferencial posterior) de las ruedas traseras en caso necesario y tres programas: 2WD (sólo tracción delantera), Auto4WD y Lock (con la tracción total enclavada entre ambos ejes), sólo para máxima tracción en superficies deslizantes.

Su propulsor es un 2.2 litros HDI que desarrolla una potencia de 156 CV a 4.000 rpm y un par de 380 Nm a 2.000 rpm. Con esta mecanica consigue acelerar de 0 a 100 km/h en 9,9 segundos y su velocidad máxima es de 200 km/h, todo ello asociado a un cambio manual de seis velocidades.

Sus dimensiones: su longitud es de 4.645 mm, su anchura 1.805 mm y su altura 1.713 mm. Su batalla alcanza los 2.670 mm y su peso es de 1.825 kg.

Su precio arranca a partir de los 34.000 euros.








Bookmark and Share


 

0 comentarios:

Publicar un comentario