La novedad que más se puede destacar en este Ferrari en cuanto al plano técnico es un sistema de tracción total del que se le ha dotado que es verdaderamente revolucionario y eficaz al mismo tiempo. Siendo compacto y ligero, éste denominado 4RM va acoplado a la parte frontal del motor y pesa la mitad que uno convencional. A través de una unidad de control electrohidráulica integrada, distribuye la potencia necesaria a las ruedas delanteras cuando les hace falta, mediante un sencillo sistema de engranajes y dos embragues húmedos, que pasan más o menos fuerza al neumático de uno u otro lado en fracciones de segundo. Una gran ventaja adicional es que permite mantener el esquema de motor central delantero y caja de cambios posterior, para lograr así un reparto de pesos igual de 47 por ciento delante y 53 por ciento detrás.
Gracias a esta nueva configuración, en su interior pueden viajar de forma bastante cómoda cuatro adultos, y su maletero ofrece una capacidad más que aceptable para este tipo de coches, ya que hablamos de 450 litros que pueden ser ampliables hasta los 800 litros. Por otro lado, todos los controles están en el volante como en un Fórmula 1, y el copiloto también puede observar diversos parámetros sobre el funcionamiento del coche en una pequeña pantalla que está situada frente a él. La altura para las piernas de las dos plazas traseras son suficientes para acomodar a personas de 1,85 metros de altura.
En cuanto a su mecánica, su nuevo propulsor es sin duda un joya, ya que nos encontramos ante el primer V12 de Ferrari con inyección directa y que pese al aumento de potencia respecto al anterior, reduce las emisiones de CO2 nada más y nada menso que en un 25 por ciento. Además de su poderío es realmente agradable de conducir, pues el 80 por ciento del par máximo está disponible a 1.750 rpm, lo que se traduce en una capacidad de recuperación realmente extraordinaria.
También han evolucionado el resto de componentes tecnológicos como por ejemplo la caja de cambios F1 de siete velocidades y doble embrague que ahora gana en rigidez, o el sistema de control magnetorológico de la amortiguación que en esta tercera generación cuenta entre otras cosas, con tres acelerómetros distribuidos en lugares estratégicos del coche para dar información más precisa, o de los enormes frenos carbocerámicos con unas pastillas de duración eterna, a excepción de que se conduzca en circuíto.
Concretando un poco más sobre su motor, es un V12 atmosférico de gasolina, central delantero longitudinal de 6.3 litros que desarrolla una potencia de 660 CV a 8.000 rpm y un par de 683 Nm a 6.000 rpm. Con ello consigue acelerar de 0 a 100 kms/h en sólo 3,7 segundos y su velocidad máxima se sitúa en los 335 km/h.
A lo que sus dimensiones se refiere, su longitud alcanza los 4.907 mm, su anchura es de 1.953 mm y su altura es de 1.379 mm. Su batalla alcanza los 2.990 mm y su peso es de 1.790 kg.
Su precio es de 287.700 euros.
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