Dodge Nitro

Si nos remontamos un poco en el tiempo, podremos recordar que el Dodge Nitro fue presentado en el año 2006 en el Salón de chicago, este robusto automóvil es el primer todoterreno de la firma y sin duda alguna una pieza clave dentro de la estrategia de lanzamiento que realizó en su día la marca en Europa. Está fabricado en Ohio (EE.UU), en la misma planta del Jeep Cherokee, y las primeras unidades se empezaron a vender en Junio de 2007.

El lema de la marca en esta ocasión alcanza la máxima expresión, con una estética rotunda y una personalidad fuera de lo común. Parte de esta línea tal y como podeis ver en la imagen, se consigue con su alta línea de cintura, su escasa superficie acristalada y sus grandes neumáticos de 20 pulgadas. Las cuadradas formas de la carrocería le permiten aprovechar al máximo el habitáculo, que acomoda perfectamente a cinco pasajeros.

Como en la mayoría de todoterrenos actuales, este modelo también está diseñado para circular la inmensa mayoría del tiempo por carreteras asfaltadas, los caminos algo escarpados ya quedan fuera de su alcance, tanto por el tipo de transmisión como por sus largos voladizos y escasa altura libre al suelo. No obstante, cabe destacar la buena respuesta del motor turbodiésel y mucho mejor todavía la del V6 automático, es algo lógico si tenemos en cuenta su gran cilindrada. En carreteras de montaña su comportamiento es más notable gracias a su sistema ERM que mitiga el balanceo, aunque cuando hay baches el eje rígido trasero se siente duro y algo saltarín.

En su interior, los asientos son cómodos, con buena sujeción y con una tapicería que repele las manchas, los plásticos empleados en el salpicadero son de alguna forma demasiado rígidos al tacto y poco vistosos. Su maletero también es grande, aunque la presencia de un práctico útil suelo desplazable hacia el exterior para facilitar la carga de bultos pesados reduce un poco su capacidad. El equipamiento de serie podríamos decir que es bastante razonable, y como suele ser habitual, se puede ampliar con numerosas opciones sobre todo de tipo tecnológico.

Su plataforma monocasco está basada en la del Jeep Cherokee y descansa sobre muelles helicoidales, con trapecios independientes delante y un robusto eje rígido guiado por cuatro tirantes longitudinales y barra Panhard detrás. El propulsor CRD con bloque de fundición y cuatro cilindros en línea es de origen Detroit Diesel, y en su culata multiválvula de aleación ligera dispone de doble árbol de levas, accionado por correa de distribución. La inyección directa es responsabilidad de un sistema de conducto único y rail común. El motor V6 a 60º de gasolina está fundido en aleación ligera y cada culata multiválvula sólo dispone de un árbol de levas con taqués hidráulicos. En el V6, la tracción es trasera con acoplamiento automático de la delantera, mientras que en el CRD el acoplamiento se realiza manualmente mediante interruptor. Los controles de estabilidad y tracción electrónicos son de serie en ambos, así como el servofreno de emergencia.

Debajo de su capó nos podemos encontrar el CDR 2.8 litros con cuatro cilindros en línea que ofrece una potencia de 177 CV a 3.800 rpm y un par de 410 Nm, con ello consigue acelerar de 0 a 100 km/h en 11,5 segundos y su velocidad máxima es de 180 km/h. El propulsor V6 de 4 litros desarrolla una potencia de 260 CV a 6.000 rpm y consigue acelerar de 0 a 100 km/h 8,5 segundos alcanzando los 202 km/h de velocidad máxima.

Su peso es de 1.890 kg en la versión CRD y 1.995 kg en la versión V6. Su longitud es de 4.584 mm, su anchura 1.856 mm, su altura 1.773 y su batalla 2.763.

Su precio oscila desde los 29.000 euros hasta casi los 40.000 euros.